Viviendo en tiempos de libertinaje
Viviendo en tiempos de libertinaje Era una fiesta animada, como muchas de las fiestas juveniles de fines del siglo veinte: una fiesta con amigos, con música rock, con abundancia de cerveza y con el espeso humo de cigarrillos. En la sala había una mujer acostada, con una lata de cerveza en una mano y un cigarrillo en la otra. Pero algo extraño estaba pasando, y tuvo que intervenir la policía de Arkansas, Estados Unidos. La mujer acostada en plena sala era la madre de Johnny Harrison, el organizador de la fiesta. Y lo más chocante y hasta macabro es que estaba muerta, dentro de un ataúd. Al hijo de la mujer lo acusaron de profanación de cadáver y lo multaron con cinco mil dólares. En su defensa, Johnny Harrison alegó que su madre le había pedido que, cuando ella muriera, la despidieran con una fiesta. Pero difícilmente se habría imaginado ella que su despedida llegara al colmo de convertirse en orgía. No hay duda de que est...